En esta semana, iniciaron los trabajos de obra civil para la instalación del sistema de iluminación LED en 116 parques de la capital.
El proyecto se desarrolla con presupuesto de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop) con una inversión aproximada de 2,6 millones de dólares. Los trabajos los ejecutará el Consorcio Iluminación Justa Quito, empresa ganadora del proceso de Contratación Pública a través de la Sercop.
Las labores tendrán una duración de 240 días. El proceso técnico constructivo consiste en instalar iluminación en diferentes puntos de canchas, caminerías, espacios verdes; también se ejecutan tareas de obra civil: excavaciones, colocación de conductores eléctricos, lámparas con energías LED y nuevos postes ornamentales de 7, 9 y 12 metros.
Al momento, el primer punto de obra se desarrolla en el parque Itchimbía, en el centro de Quito. El personal operativo inició con trabajos preliminares como: apertura de zanjas para cableado y colocación de un letrero que indica la información general de la obra.
Progresivamente los frentes de obra, llegarán a los parques priorizados en este proyecto, mismos que corresponden a parques en los sectores del sur, en las parroquias de: Solanda, Quitumbe, San Bartolo, La Mena, Chillogallo, Turubamba, Chilibulo, La Ferroviaria, La Magdalena, Chimbacalle. En el sector Centro: San Juan, Centro Histórico e Itchimbía. Al norte: Calderón, Ponceano, Comité del Pueblo, Mariscal Sucre, Belisario Quevedo, Jipijapa, Iñaquito, La Concepción y Pomasqui; finalmente el parque de Cumbayá de los valles.
La administración actual, incorporó hace pocos días, 77 guardias de seguridad privada a los parques metropolitanos; esto sumando a los 116 parques contemplados en el proyecto de iluminación ayuda a garantizar espacios públicos seguros para los quiteños, permitiendo momentos de encuentro familiar, deportivo, relajación y esparcimiento.
La iluminación con la que se intervendrá dentro de los parques es tipo LED lo que contribuye no solo al mejoramiento estético y a la reducción de la inseguridad, sino también colabora con el medio ambiente, pues estas luces reducen el consumo eléctrico y la contaminación.
Se socializa todas las intervenciones con la comunidad, a fin de que las personas se apropien de los espacios públicos y retroalimenten al proyecto con ideas innovadoras, nacidas en el barrio.