Ante la creciente demanda de soluciones de movilización y de alternativas creativas en la venta de automóviles, cada vez más empresas salen de lo tradicional, para brindar a la ciudadanía opciones que satisfagan sus necesidades. En el Ecuador, por ejemplo, Volkswagen implementó un nuevo modelo de negocio, denominado Volksrenting que facilita la oferta de vehículos bajo la modalidad de renta, y que está dirigido a empresas, profesionales y ciudadanos en general. Esto, sin dejar de lado la venta tradicional.
Al tener dos posibilidades, la elección entre comprar y rentar un automóvil puede ser una decisión difícil. Daniel Holguín, Gerente de Finanzas y Crédito de Volkswagen Ecuador, señala que lo más importante es tener clara la diferencia entre ambas. “Hablar de una compra significa que la persona o empresa adquiere un activo fijo, teniendo que desembolsar el 100% del valor al concesionario para adquirir el mismo; la renta, por otro lado, implica únicamente el pago de un canon mensual fijo por el lapso del contrato de arriendo, sin tener que disponer de una entrada u otro valor, más que el establecido con la compañía”, explica.
Con el objetivo de contribuir a que las personas tomen una decisión acertada al momento de adquirir su vehículo, el representante de Volkswagen Ecuador detalla a continuación algunos de los aspectos más relevantes sobre la compra y renta de un auto.
¿Cuándo comprar un auto?
- “Comprar un auto trae consigo la adquisición de un bien que pasa a ser parte del patrimonio del comprador”, indica Holguín. Ahora bien, ¿cuándo debe una persona optar por esta alternativa? Según el experto, estas son las razones por las que la compra debe ser la vía:
- Si se piensa a corto plazo y se busca adquirir un bien que se venderá en 1 o 2 años. Esto, de acuerdo con el ejecutivo de Volkswagen, debido a que el auto se deprecia con el paso del tiempo y con el uso, por lo cual si se quiere recuperar un buen porcentaje de la inversión inicial, no se debería esperar más tiempo para venderlo.
- Si se planifica realizar largos recorridos anuales y/o trabajos extremos que posiblemente afecten física o mecánicamente al vehículo.
- Si no se va a utilizar la deducibilidad del gasto como un beneficio tributario.
- Si existe un excedente de liquidez y se apuesta por ganar en la reventa del mismo. “Esto es a lo que nos referimos usualmente como costo de oportunidad”, comenta.
- Previo a comprar un auto, el especialista sugiere que la persona o empresa verifique que tenga la capacidad monetaria en el tiempo para afrontar el pago de mantenimientos, matrículas, seguros, dispositivos, cambio de llantas, entre otros gastos comunes que conlleva una compra. Además, “debe ser consciente de que perderá liquidez en un activo fijo que no le generará un ingreso, pudiendo invertir ese dinero en su negocio o en una póliza.”