El organismo de control y WWF-Ecuador suscribieron un acuerdo que tiene como objetivo mejorar las capacidades técnicas y profesionales de la Contraloría en temas ambientales.
Este lunes 17 de enero, el Contralor General del Estado (s), Ing. Carlos Riofrío González y el director del Fondo Mundial para la Naturaleza en Ecuador (WWF por sus siglas en inglés), Tarsicio Granizo, firmaron el “Memorando de Entendimiento para el Fortalecimiento Institucional en Materia Ambiental, entre World Wildlife Fund Ecuador y la Contraloría General del Estado”.
Los delitos cometidos contra especies y ecosistemas siguen siendo negocios ilícitos y lucrativos; así, el tráfico ilícito de vida silvestre (incluida la madera y la pesca) constituye el cuarto mayor comercio ilegal a nivel mundial. Ecuador, uno de los países más biodiversos del mundo, no ha sido ajeno a esta problemática.
La lucha contra el tráfico de vida silvestre y los delitos ambientales requiere de la suma de esfuerzos y recursos, tanto por parte del sector público como desde las organizaciones de la sociedad civil. El acuerdo articulará acciones entre ambas entidades para fortalecer el ejercicio del control público en el ámbito ambiental.
El convenio contempla el desarrollo de capacitaciones, apoyo técnico en la realización de exámenes especiales con enfoque ambiental, preparación de publicaciones, acompañamiento en las estrategias de difusión y en las iniciativas internacionales en las cuales participe la CGE.
Al respecto, el Contralor Riofrío destacó la importancia de suscribir el primer convenio de esta naturaleza que propiciará un trabajo conjunto para prevenir delitos ambientales en el país. “Con el apoyo técnico de WWF-Ecuador potenciaremos el control público y la fiscalización a la gestión medioambiental”, dijo.
WWF-Ecuador a través de la implementación del proyecto “Fortaleciendo la Gobernanza de los Recursos Naturales”, financiado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), busca soluciones prácticas para abordar los aspectos que dificultan una gestión transparente y sostenible de la vida silvestre, los bosques y la pesca.
Por su parte, Tarsicio Granizo indicó “históricamente, los delitos ambientales no han sido debidamente dimensionados o abordados por el Estado, lo que ha generado consecuencias negativas sobre la economía, el ambiente y la seguridad nacional”.
Señaló que WWF-Ecuador brindará asesoramiento técnico a la Contraloría, a través de actividades de capacitación; apoyo técnico en las auditorías y demás actividades que el ente de control realice con enfoque ambiental.
Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) es una ONG internacional más de 5 millones de seguidores y una red global activa en más de 100 países y opera en Ecuador con el objetivo de detener la degradación del medio ambiente y construir un futuro en el que los seres humanos vivan en armonía con la naturaleza, conservando la diversidad biológica del mundo, asegurando que el uso de los recursos naturales renovables sea sostenible y promoviendo la reducción de la contaminación y hábitos de consumo insostenibles.