• En el informe, el Prefecto y la Viceprefecta informaron los resultados alcanzados como consecuencia de la inversión en obras, ejecución de proyectos y gestión. Se dio cuenta que en vialidad se registró el mayor monto de inversión: cerca de 10 millones de dólares. Aurelio Guerrero, miembro del Comité de Gestión del Parlamento de Imbabura, en representaciòn de la ciudadanía, avalizó la buena acción y el cumplimiento de los procedimientos de Participación Ciudadana.
IBARRA.- “El 2020 será, sin duda, recordado como uno de los de mayor incertidumbre y de dificultades en la historia moderna de nuestra provincia, país y el mundo. Apenas transcurrían los primeros meses y ya estábamos atravesando una emergencia sanitaria, que pensábamos entonces, iba a ser de corta duración. La realidad fue distinta y hasta ahora no podemos salir de ella y tampoco podemos vencer las consecuencias nefastas que ha traído consigo, primero en la salud y luego en lo económico y en lo social”. Así comenzó manifestando el prefecto de Imbabura, Pablo Jurado, en el acto de Rendición de Cuentas 2020, realizado este miércoles, 30 de junio de 2021.
La autoridad de la provincia refirió que los graves efectos de la pandemia han exigido mayor trabajo y mayor compromiso con las causas de la población más necesitada. “Ante ello, hemos puesto a prueba la gestión y la solidaridad para atender las necesidades más apremiantes de nuestros coterráneos, especialmente de los sectores rurales. Debimos reorientar nuestro trabajo y los planes trazados, pensando que, más allá de la obra física, lo más importante es el bienestar del ser humano”.
“Colaboramos con el sector de la salud, ayudando a mejorar su trabajo. La gestión tuvo especial dinámica, convencidos que hoy más que nunca debíamos estar unidos y solidarios para enfrentar esta crisis. Pusimos en práctica varias iniciativas para ofrecer ayuda emergente ante el impacto de la Covid-19. Desarrollamos proyectos productivos y de seguridad alimentaria para las familias más necesitadas, entregando ayuda directa. Con ello, logramos solventar las urgentes necesidades de alimentación y abrimos puertas a la generación de ingresos económicos”.
Si bien la gestión ante la emergencia sanitaria fue oportuna, en este año se concretaron varias obras y proyectos tangibles, con la visión de mejorar la calidad de vida de la población y en el afán de seguir dando pasos firmes en el camino hacia el desarrollo sostenible y sustentable. La planificación anual y el cuadro de inversiones fue cumplido a cabalidad, en medio de la crisis, gracias al apoyo de los organismos municipales, parroquiales y la ciudadanía que no dudaron en ‘arrimar el hombro’ para conseguir los objetivos planteados.
INFORME
Delegados de organismos estatales, representantes de organizaciones sociales y líderes comunitarios dieron fe de este informe, que, en cumplimiento de las medidas preventivas de salud, se lo llevó a cabo de manera virtual. En este escenario, el titular del organismo provincial relató que la mayor inversión institucional correspondió al área de infraestructura física. Se ejecutaron 33 obras, entre ellas, empedrados, adoquinados, puentes, asfaltados, muros y pasos de agua, habiéndose destinado para ello 4´912.331 dólares. Paralelamente, se mejoró, construyó, rehabilitó y se llevó a cabo el mantenimiento permanente de los caminos por administración directa, a un costo económico de 4´812.537 dólares.
Otro de los rubros importantes fue el de riego. El informe del prefecto destacó que se destinó 1´937.678 dólares para impulsar 20 proyectos relacionados con la rehabilitación, revestimiento, reparación, mejoramiento y construcción de canales. Adicionalmente, se realizaron estudios, cerramientos y se implementaron sistemas de riego como parte de un programa hídrico estratégico para poder tener una mejor producción en los cultivos.
En materia de gestión ambiental, en Imbabura Geoparque Mundial de la UNESCO se consideró imprescindible el desarrollo sostenible. El objetivo de esta acción es lograr un equilibrio entre el bienestar de la población, el crecimiento económico y la protección y conservación del entorno medioambiental. Por eso, para obtener buenos resultados se puso énfasis en una adecuada política ambiental, acompañada de numerosas actividades, que se concentraron en la meta principal de lograr el equilibrio mencionado.
En el tema de cooperación Internacional se fortaleció la capacidad de acción institucional para gestionar apoyo externo. Esto permitió confirmar convenios de trabajo conjunto en las áreas social, de producción y ambiente. Alrededor de 3 millones de dólares es la cifra contabilizada por concepto de apoyo para proyectos, provenientes del Programa Mundial de Alimentos, la Embajada de Estados Unidos y el Fondo Ítalo Ecuatoriano para el Desarrollo.
Siendo Imbabura el primer Geoparque Mundial en Ecuador, declarado así por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura – UNESCO-, a partir de del 17 de abril de 2019, se convocó a una participación activa de todos los estamentos del sector público, privado, organizaciones de la sociedad civil, academia y comunidad en general, en una acción conjunta para alcanzar los objetivos de educación, geoturismo y conservación de los recursos existentes.
“En esta rendición de cuentas, que representa un sagrado deber de los servidores públicos, queremos resaltar los avances que ya hemos logrado, así como presentar nuevas ideas sobre la provincia que entre todos estamos construyendo. Nos encontramos ante nuevos desafíos que nos ponen a prueba y nos exigen estar a la altura de este momento histórico. Somos conscientes que en las situaciones adversas es cuando más se requiere de la voluntad de unirnos y de colocar el bienestar colectivo por encima de cualquier interés”, enfatizò el Prefecto como conclusión del informe.
El informe de la gestión ejecutada en desarrollo económico estuvo a cargo de la viceprefecta Cristina Males quien señaló que se han generado proyectos, entendiendo que el verdadero desarrollo constituye la activación y canalización de las fuerzas sociales. La tarea del pasado año dio un giro completo, dijo, debido a la crisis sanitaria que provocó la Covid – 19.
Agregó que se materializaron proyectos de seguridad y soberanía alimentaria en favor de las familias más afectadas por la pandemia del coronavirus en los sectores rurales, en conjunto con los gobiernos parroquiales. Se impulsaron aún más los emprendimientos productivos, facilitando financiamiento. Se construyó la Agenda Productiva Provincial y se concretó el convenio de financiamiento no reembolsable para mejorar la competitividad de las cadenas productivas de frutales por un monto de 1´450.719 dólares entregado por el Fondo Ítalo Ecuatoriano.
Entre otras actividades resaltó la elaboración y difusión de medidas de bioseguridad, así como la realización de ferias en distintos puntos de la ciudad de Ibarra para garantizar el abastecimiento de alimentos para la población en medio de la crisis sanitaria. Refirió los buenos resultados en el manejo y recuperación de suelos; el Programa de Cofinanciamiento para Emprendimientos Productivos; las campañas de sanidad animal; la capacitación a productores; y,el Plan de Acción Emergente para la reactivación económica frente a los efectos de la Covid-19 en el tema turístico.