• La Prefectura lidera una acción en todo el territorio para evitar el aislamiento de las poblaciones, debido a la destrucción de los caminos. La maquinaria ejecuta tareas de limpieza, rehabilitación y encauzamiento de agua en canales de riego y quebradas. Paralelamente, opera en 14 frentes en donde se realiza el mantenimiento de los tramos principales de las comunidades.
IBARRA.-La vialidad de la provincia sigue sufriendo daños a causa de la lluvia que no para en estos días. Los torrenciales aguaceros provocan derrumbes, afectaciones en la calzada y pérdida de la mesa en varios sitios e incluso el desbordamiento de canales y quebradas. Estos hechos se evidencian con mayor impacto en las zonas rurales.
Ante esta situación, la Prefectura interviene en forma urgente en los lugares en donde se registran mayores problemas, en otros, los convenios que se mantienen con los gobiernos parroquiales sirven para ejecutar de manera conjunta la limpieza de las vías. Se trata de sumar esfuerzos para atender lo más urgente posible ante la emergencia que soporta la provincia por la lluvia.
El equipo caminero está distribuido en los seis cantones del territorio por disposición del prefecto Pablo Jurado. El equipo técnico de la Dirección de Infraestructura Física es la encargada de planificar y concretar las acciones, teniendo como principal apoyo a los obreros y la máquina pesada.
Según los reportes de esta semana, la maquinaria realiza trabajos de limpieza en la parroquia San Francisco de Sigsipamba, cantón Pimampiro. El camino que conduce desde Pimampiro hacia esta localidad soportó un derrumbe en el sector La Mesa. Un tractor, una cargadora y volqueta desalojan los materiales que dificultan el tránsito, garantizando así el paso de vehículos y personas.
Otro frente se fijó para llevar a cabo el encauzamiento del río Mataquí, que registra un alto nivel de caudal de agua. Esta tarea se vio necesaria, ante la amenaza de que exista un desbordamiento y afectación a las vías que van hacia Sigsipamba.
En la parroquia Ambuquí del cantón Ibarra, una cargadora habilita el camino que conduce a la comunidad San Clemente. Los torrenciales aguaceros provocaron daños en esta arteria de segundo orden, ante lo cual se hizo necesario intervenir con una máquina para superar esta emergencia.
En el barrio Chorlavisito de Ibarra, los pobladores se vieron alarmados por las inundaciones de los caminos, lo cual impedía la movilización. La Prefectura envío una retroexcavadora y volquetes para limpiar el lodo, la tierra, escombros y vegetación, causantes de las dificultades. La labor se cumplió a cabalidad, ante la satisfacción de los moradores.
En el cantón Cotacachi, la zona de Intag soporta daños en la mayoría de las parroquias. La maquinaria institucional se encuentra interviniendo en los tramos que son los más afectados. En esta localidad, la programación de mantenimiento vial que se mantiene normalmente debió ser alterada para dar prioridad a la emergencia.