Así lo califica el OIDP
- El organismo provincial, dirigido por Pablo Jurado, es uno de los serios aspirantes a ganar el máximo reconocimiento internacional en el tema de políticas públicas, enfocadas en democracia participativa.
IBARRA.- La postulación de la Prefectura de Imbabura para la Distinción “Buena Práctica en Participación Ciudadana”, convocado por el Observatorio Internacional de la Democracia Participativa, OIDP, para reconocer políticas públicas que implementan los gobiernos locales, a nivel del mundo, fue calificada entre las 20 mejores, de entre 123 participantes.
Esta decisión fue publicada en la página web de esta red internacional abierta a todas las ciudades, organizaciones y centros de investigación con interés en conocer, intercambiar y aplicar experiencias sobre democracia participativa en el ámbito local. Nació en el 2001 en el marco de los Proyectos de Cooperación Descentralizada del Programa URB-AL de la Comisión Europea y su constitución oficial fue en el mes de noviembre de ese año en Barcelona, durante la I Conferencia del OIDP.
La distinción “Buena Práctica en Participación Ciudadana” premia experiencias implementadas en el campo de la democracia participativa, la deliberación ciudadana, el fortalecimiento comunitario, el gobierno abierto, las innovaciones democráticas y participación ciudadana, temas en los cuales, la Prefectura, bajo el liderazgo Pablo Jurado, tiene gran mérito y experiencia.
Tras la postulación, la OIDP, conforme lo establecido, evaluó y calificó la propuesta, valorando el cumplimiento de los criterios de las bases. Cada miembro del jurado analizó las propuestas y emitió un informe, así como una breve justificación. De entre los postulantes, la Prefectura de Imbabura pasó a ser parte del grupo de 20 calificados para avanzar a la fase final que es la publicación de los resultados, previsto para el próximo mes de octubre. Los premios se entregarán en el marco de la conferencia de Grenoble de diciembre de 2022. La secretaría del OIDP hará una publicación con las prácticas presentadas.
La propuesta de la Prefectura reseña el trabajo que se viene realizando en el desarrollo de la gestión de Jurado (dos periodos consecutivos de 4 años cada uno). Se trata de la experiencia de las asambleas parroquiales, en donde la ciudadanía decide lo que se debe hacer en su localidad. Es el Presupuesto Participativo, que en contexto compromete la participación de los tres niveles de gobierno: parroquial, cantonal y provincial, optimizando los recursos para lograr una cobertura importante en cada uno de los cantones y parroquias con proyectos de impacto.
Mediante una ordenanza que regula la estructura y funcionamiento del Sistema de Participación Ciudadana, se delimita que del 100 % de la asignación presupuestaria, el 30% será destinado para el Presupuesto Participativo y el 70 % para proyectos estratégicos de la provincia. La determinación y distribución se sujeta a los siguientes criterios técnicos: 1) La extensión territorial de cada parroquia rural; 2) el indicador de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI); 3) el número de habitantes; y, 4) de una asignación presupuestaria fija, de base, para cada parroquia rural.
La Participación Ciudadana en las asambleas parroquiales es la columna vertebral que permite democratizar y priorizar la inversión en los proyectos viales, de riego, ambientales y de desarrollo económico, de acuerdo con las competencias en las que opera el organismo provincial. Las asambleas son espacios en donde se evidencia el poder ciudadano, el respeto a esos derechos y un diálogo que dan lugar a la planificación de obras y proyectos dirigidos a mejorar la calidad de vida de los habitantes en cada una de las diferentes comunidades.
PIE DE FOTO: Las asambleas parroquiales son ejemplo de auténtica Participación Ciudadana en el territorio imbabureño.