El consejero Luis Verdesoto, presentó ante el Pleno del Organismo Electoral una propuesta razonada, acorde al pedido de las organizaciones políticas, técnicamente sustentada y con base en los diversos análisis realizados por la pluralidad de sectores sobre la situación económica y social, que permitió reducir el Fondo de Promoción Electoral de un poco más de $40 millones a $20.327.773 millones.
Pese a que la propuesta de Verdesoto se aprobó en el Pleno del CNE con los votos a favor del vicepresidente Enrique Pita y la presidenta Diana Atamaint, esta no contó con apoyo unánime, pues el consejero José Cabrera se abstuvo y la consejera Esthela Acero votó en contra de la reducción del Fondo de Promoción Electoral porque este “superaba los $ 20 millones”. Actuación que fue criticada por Verdesoto en Pleno del CNE y en su cuenta de Twitter al manifestar: “En el #PlenoCNE presenté una propuesta técnica que permitió reducir el Fondo de Promoción Electoral de $40 millones a $20.327.773 millones. La supuesta polémica por esos $327.773 fue un pretexto para encubrir la falta de voluntad política para reducir el fondo”.
Luis Verdesoto sustentó su propuesta de reducción del Fondo de Promoción Electoral en cuatro variables a considerar:
1. La situación económica del país.
2. Reducción del Presupuesto del Estado.
3. Costos de las campañas.
4. Costos de las campañas digitales.
En lo referente a la situación económica del país, el consejero expuso que “Ecuador es uno de los países que más decrecerá en la región. Las más optimistas proyecciones de decrecimiento de la economía ecuatoriana giran alrededor del 10% y las más pesimistas llegan al 13 y 14%. Es decir, es probablemente la crisis más grande de nuestra historia contemporánea”. Las elecciones no son ajenas a esta crisis. El Fondo de Promoción Electoral es un subsidio específico a la política, que debe permitir la concurrencia de los actores políticos a la escena sea nivelada. Por ende, afirmó Verdesoto, no puede estar sujeto a transacciones clientelares con dinero público, basadas en cualquier tabla, con concesiones arbitrarias.
En cuanto a la reducción del Presupuesto del Estado, Verdesoto sostuvo que “el Presupuesto del Estado debe ser una referencia. Su reducción no consiste en un ejercicio meramente casuístico. La situación presupuestaria es consecuencia de la crisis general que vivimos y de un tipo gasto de arrastre”. A lo que agregó que la magnitud de la caída en la recaudación de IVA tiene efectos directos en los resultados fiscales de corto plazo. El IVA es el impuesto que más rápido se recauda y genera efectos territoriales. De allí vienen parte de los ingresos que tienen que traducirse en tipos de egreso como el Fondo de Promoción Electoral. No es posible siquiera pensar que el Fondo o la “publicidad electoral” se origine en, por ejemplo, el financiamiento externo.
Mientras que, en torno a las campañas electorales, reiteró que en una pandemia el costo de la campaña presencial es menor. “En la actualidad, la campaña electoral no realizará mítines políticos, visitas personales, recorridos de calles o coliseos llenos de masas. No habrá contacto masivo entre simpatizantes, candidatos y electores. Del total de gastos generados en una campaña en el año 2017, que ascendía alrededor de USD $1.345.418, los rubros destinados a estas actividades constituyeron el 80%, tornándose necesario la creatividad a través de mecanismos tecnológicos y electrónicos para llegar al elector”.
Para finalizar, el consejero Verdesoto enfatizó que la publicidad en medios digitales tienen un costo mucho más bajo que en los medios convencionales en aproximadamente un 55%. “Con costo para un binomio presidencial que para el año 2017 fue de aproximadamente $ 576.000 si reducimos, por ejemplo, el 52.20%, el valor de la promoción electoral para el 2021 sería de $275.846,40, lo cual equivaldría el 47,80% del límite máximo que determina la Ley”.
Con la aprobación de la propuesta de reducción al Fondo de Promoción Electoral elaborada por Luis Verdesoto, el monto de promoción electoral máximo a utilizar será del 47,9%, es decir el 5,26 %, del Limité Máximo del Gasto Electoral para el binomio presidencial y el 7.185% para las demás dignidades.