Tres candidatos con serias posibilidades de llegar a la presidencia de la república: Yaku Pérez representante del poderoso movimiento social ecuatoriano vinculado a la verdadera izquierda nacional, Guillermo Lasso el banquero ultra derechista y socialcristiano, Andrés Arauz delfín del correísmo tecnocrático modernizador capitalista y seudo-izquierdista; y el descartado Álvaro Noboa, otro representante de rancia oligarquía populista de derechas. En apariencia una difícil decisión electoral a tomar por los trece millones de ecuatorianos, el próximo 7 de febrero de 2021.
Andrés Arauz, un forzado parto correísta, burócrata segundón y economista seguimono de la revolución ciudadana, yuppy clasemediero pretendidamente de izquierda, mal disimulado socialista del siglo XXI, brazo ejecutor de la política corrupta de su menor en Bélgica, responsable de la corrupción y el sobreendeudamiento del Ecuador, zapateador impostado de la música protesta latinoamericana con la que se avergonzó el saludo del Che: ¨hasta la victoria siempre¨, ahora devenido candidato para continuar el saqueo nacional en la tercera versión de la revolución ciudadana, luego del desastroso paso por el gobierno de su antiguo coideario, Lenin Moreno. Arauz, secundado por una campaña sucia, sustentada económicamente por su jefe en Bélgica, se basa en encuestas pagadas, entrevistas amañadas y el trabajo de engañar a la gente a través del internet.
Rafael Correa, sabe que se juega la vida en estas elecciones, buscará de cualquier manera que su pupilo acceda a la presidencia, con el propósito de burlar a la justicia de los treinta procesos penales que le esperan, incluida la orden de prisión de ocho años por el caso “Arroz Verde”. La candidatura de Arauz ha sido puesta en marcha a través de las redes sociales, con trolls y hackers billeteados que operan desde el exterior, desde México, Argentina, Venezuela, Estados Unidos y otros países y aquí en Ecuador. La mentira es la base fundamental del correísmo, con ofrecimientos demagógicos que le lleva a ofrecer irresponsablemente 1.000 dólares gratis a un millón de ecuatorianos, con tal de obtener el voto y no saber de dónde sacarán el dinero; 800 mil empleos, no saben cómo; por último, ofertaron la “minería inversa”, con la que pretenden sacar oro de los celulares, ofrecimiento engañoso que les costó la burla de muchos ecuatorianos.
Lo cierto es que esta candidatura se sustenta en el cuento, la mentira y los millones de dólares que quizá con tiempo nos robaron a los propios ecuatorianos. Correa y Arauz dando entrevistas todos los días, en cualquier medio, en vivo, vía internet, en una campaña desesperada, tratando de hacer lo que hicieron siempre, para llegar al poder y cuando estaban en el poder, engañar. ¿De dónde tanta plata? ¿Hay medios y comunicadores que se venden al mejor postor? Y detrás de esto un pueblo empobrecido, ingenuo, ignorando los beneficios de estos nuevos ricos, esos pipones que se enriquecieron y permitieron los mejores años de ganancias de la banca en la década robada.
Guillermo Laso, el banquero, el chulquero oficial del salvataje bancario y beneficiario del perdón de deudas por impuestos que le otorgaron graciosamente Correa y Moreno. Lasso políticamente pertenece a la ultra derecha trasnochada y neoliberal bien identificada, candidato en el 2013, 2017 y 2020, con suficiente dinero para soñar con la presidencia, apoyado por los grupos de poder, de ahí el respaldo de las cámaras de la producción, comercio, industriales, mineros, banqueros, los grandes medios de comunicación; tiene el respaldo de las élites millonarias del país, los ricos, los añiñados, hijitos de papito y mamita, tiene suficiente dinero para pagar a las encuestadoras que le ponen en primero y segundo lugar. Un bachiller que dice saber y poder solucionar los problemas económicos del país. No hay mucho que decir de sus bondades, aparte de recordar que ha estado con los gobiernos de derecha, incluido en el gobierno de Mahuad, fue parte del “feriado bancario” que le costó la vida a miles de ecuatorianos, otro millonario con sueños de grandeza, que no perdona un centavo por intereses a sus clientes en el Banco de Guayaquil. También ofrece empleo, créditos agropecuarios, exonerar impuestos a proyectos turísticos y por último: la cerveza y el “ya que chucha” al pueblo pobre.
Yaku Pérez, un hombre digno de la confianza popular en las urnas, hijo consecuente de su pueblo a la zurda de la política, luchador incansable por el agua. Hombre sencillo, honesto, el más capacitado y preparado de los diez y seis nombres postulantes a la presidencia de la República, perseguido por el correísmo, ahora perseguido por los derechosos mediáticos amos y señores exclusivos de la opinión pública y el micrófono esquivo al pueblo, incluidos portales de periodismo. En efecto, “todos contra Yaku Pérez”, parece ser la consigna, desde las decisiones del gobierno nacional, el consejo nacional electoral (CNE), tratando de impedir el encuentro con el pueblo ecuatoriano, en caravanas y caminatas, labor en territorio, elemento principal de la campaña de Yaku. Y sobre todo, el direccionamiento de los grandes medios de comunicación y las famosas encuestadoras, que tratan de opacar la verdadera fuerza que ha tomado a nivel nacional su candidatura.
Convertido en un verdadero peligro para los grupos de poder, por sus tesis de cambios radicales, revolucionarios, les asusta el tema de la Consulta Popular para que el pueblo decida sobre la defensa de la naturaleza en contra del extractivismo. Les preocupan las propuestas serias, sólidas para lograr recursos económicos y fuentes de trabajo. Se ha ido colocado en la centro-izquierda, tratando de atraer a los votantes con sus propuestas para los 18 millones de ecuatorianos, no solo para el sector indígena y campesino. Yaku Pérez viene avalado de un Plan de Gobierno, elaborado en el Movimiento de Unidad Plurinacional Pachakutik, denominado “Minka por la Vida”, que incluye cuatro ejes vitales: ecología, economía, educación y ética. Convoca a la juventud ecuatoriana con sus tesis ecologistas, defensa de la naturaleza, de los animales, de los derechos humanos, defensor de los sectores más necesitados, exactamente de los pobres. Los medios de comunicación, acolitados por sus candidatos más pagadores Lasso y Arauz, vienen atacando sistemáticamente a Yaku en una campaña totalmente sucia, tratando de ocultar las propuestas serias de gobierno que han sido trabajadas en Pachakutik por especialistas conocedores de los diferentes temas.
El pueblo ecuatoriano convocado a las urnas el domingo 7 de febrero de 2021, tomará su decisión final para el futuro de la Patria.
Ernesto Guevara
Quito, 8 de enero de 2021